La Virgen era llevada por un tractor con un remolque cubierto y los numerosos devotos iban detrás caminando y soportando las duras inclemencias del tiempo. Con este traslado se da por cerrado el programa de actos que ha organizado la cofradía con motivo de la estancia en Lopera de la Virgen de Alharilla y que ha durado una semana.