Los sectores agrícolas utilizan cerca de un 80% del consumo total de agua. No obstante, considerando que la presión (bombeo) es imprescindible en el riego, éste se realiza a expensas de un consumo energético y de gasto que convierte al regadío moderno en menos rentable.
Tanto las administraciones como los regantes buscan maximizar la eficiencia energética como valor añadido a la mejora del uso del agua, incrementando la rentabilidad y reduciendo a la vez, la huella medioambiental.
“Barsha” es una bomba hidro – propulsada para regadío. Se presenta como una solución sostenible que emplea la energía cinética de ríos, canales y acequias para bombear agua sin necesitar otras fuentes externas de energía, como pueden ser los combustibles fósiles o la electricidad.
La empresa aQysta ya ha instalado 35 bombas por todo el mundo y la primera en España ya se encuentra en marcha en el Cortijo San Rafael de Villanueva de la Reina.