

El municipio de Villanueva de la Reina celebró con éxito de público y organización el 35 Festival Flamenco El Olivo del Cante. Comenzó el evento con el pregón del festival a cargo de José María Polo Sáez “Peñuela”, que hizo un recorrido por la vida de la peña, sus 35 años de vida y sus experiencias en la misma, resaltando su gran labor pedagógica con los 16 años de escuela de flamenco.
Rafa del Calli abrió la parte musical del festival cantando solea, caña, cantes de levante, tangos, cantiñas y fandangos. A continuación fue Julián Estrada el que puso en escena su último trabajo “Tributo al Maestro” en el que rinde homenaje a la actual llave del cante Antonio Fernández Díaz “Fosforito”.
Rodeado de un elenco de músicos extraordinarios Julián hizo Tona/seguiriya, Malagueña Abandolao, Farruca, Solea, Alegrías, Granaina, Tangos, Bulerías y Fandangos de Huelva.
La sorpresa de la noche fue la colaboración especial del gran bailaor cordobés Rafael del Pino “Queco” que en varias ocasiones puso al público en pie con su entrega, fuerza y técnica.
Cuando todo parecía visto en el recinto ferial apareció sublime, como una bocanada de aire fresco sobre las tablas y pasada la media noche, Ángeles Toledano, que atrajo la atención del público que no se movía de sus asientos. Esta artista natural de Villanueva de la Reina siempre aporta algo nuevo, con señas de identidad muy personales y marcadas hace que parezca fácil, metiendo los cantes en cintura y levantado al público que para nada se distrajo a pesar de la hora.
Cantes libres y personales, Seguirilla, guajiras, tangos, bulerías y algunos fandangos fue el repertorio ofrecido por esta ya consagrada cantaora que en todo momento estuvo emocionada por la vuelta a su casa, con su gente. El mantenedor del acto fue Pedro Soto, presidente de la Peña el Olivo del Cante.