De esta forma, el Palacio Provincial, el Centro Cultural Baños Árabes y la Casería Escalona dejarán de estar iluminados durante ese tiempo, igual que otros monumentos y edificios de todo el mundo. De hecho, el pasado año participaron en esta propuesta miles de ciudades de 188 países del mundo que apagaron más de 17.000 monumentos y edificios icónicos. Además de dejando inactivas las luces de estos edificios, la Diputación se suma a esta campaña difundiendo entre los 97 municipios de la provincia y la ciudadanía en general esta acción de concienciación contra el cambio climático.
Este año, esta iniciativa impulsada por la Organización Mundial de Conservación de la Naturaleza quiere ir más allá y ha propuesto otros retos, como no consumir carne durante todo el día, dado el impacto que la ganadería tiene en la emisión de gases de efecto invernadero; no utilizar envases de plástico de un solo uso para no incrementar los restos de este residuo en unos mares que ya están saturados de este material; y ahorrar energía en el hogar y en desplazamientos para contribuir así a reducir las emisiones de CO2 en un momento en el que el cambio climático está más presente que nunca, con los años más cálidos de la historia, olas de calor y sequías prolongadas y fenómenos meteorológicos extremos cada vez más frecuentes.