En dicha intrusión se utilizaron sierras radiales, cizallas y mazos para cortar los vallados de protección exterior e interior. Para evitar que los agentes de la Guardia Civil se acercaran a la zona donde se estaba produciendo el intento de entrada irregular estas personas lanzaron a los agentes recipientes de plástico con excrementos y cal viva y emplearon sprays a modo de lanzallamas, piedras y palos. Además se intervinieron cócteles molotov, así como varias bolsas con hachís.
Como consecuencia de la violencia utilizada por los inmigrantes en su intrusión resultaron heridos de diversa consideración 22 guardias civiles. La investigación iniciada como consecuencia de estos hechos ha dado como resultado la identificación de los subsaharianos que protagonizaron la dirección logística y operativa de dicha intrusión.
Con la actuación llevada a cabo por la Guardia Civil se ha podido poner a disposición judicial a los presuntos responsables de los mismos, así como al jefe del grupo que lideró la entrada en territorio nacional de 602 inmigrantes de manera irregular y violenta.
Los detenidos proceden de Togo, Camerún y de la República de Guinea, ofreciendo el cabecilla togolés una fuerte resistencia durante la detención que causó lesiones de carácter leve a uno de los componentes del operativo. Los detenidos han sido puestos a disposición del Juzgado de Instrucción número 5 de Ceuta, quien ha declarado Secreto de Sumario.