Por lo general, la lista de nombres más frecuentes en Andalucía no suele variar mucho de un año para otro, aunque como en el resto del territorio español, la región no es ajena a las modas y a las tendencias que se deslizan a través de personas o personajes de referencia que adquieren popularidad vía televisión, cine, publicaciones literarias o del corazón. De esta forma, los nombres más comunes de Andalucía, que son Antonio, en el caso de los hombres, y María del Carmen, en el caso de las mujeres, conviven con aquellos nombres surgidos de los últimos fenómenos de masas, como Arya o Daenerys, nombres de dos personajes destacados de la serie ‘Juego de Tronos’, que si bien antes no estaban en las preferencias de los andaluces, hoy día ya existen 98 Aryas (la pequeña de la casa Stark), y 27 Daenerys (la última representante femenina de la casa Targaryen), registrando un notable aumento en 2018 en relación al año anterior.
En cuanto al ‘top ten’ de los nombres más comunes o más frecuentes en Andalucía, los cinco primeros puestos en el caso de las mujeres son para el mencionado María del Carmen, seguido de María (solo) y Carmen (solo), Ana y Josefa. En la parte baja de la tabla hay movimientos y suben un puesto María Dolores e Isabel en relación al pasado año en detrimento de Antonia y Francisca, que van perdiendo popularidad.
En el caso de los hombres, el ránking lo encabezan Antonio, Manuel, Francisco (que sube un puesto en relación al año anterior), José (que baja un puesto), y Juan, Rafael, José Antonio, Francisco Javier, José Manuel y David, que mantienen sus posiciones por este orden.
María y José.
Si atendemos a la palabra más utilizada entre los nombres andaluces (tanto hombres como mujeres), nos encontramos con María, que se repite en nombres sólos y compuestos en el caso de las mujeres, pero también en nombres compuestos de hombres, siendo el de José María el que más se repite en el conjunto del territorio andaluz. Le sigue, por los mismos motivos, la palabra José, que se usa indistintamente para nombres compuestos tanto en mujeres como en hombres.
Otra de las casuísticas que revela el informe estadístico es la variación de los nombres, según la provincia o el territorio en el que se encuentren los andaluces. Así, el nombre de Antonio es mucho más común entre los residentes de las provincias orientales de Andalucía, mientras que Manuel se da mucho más en las que se encuentran más al oeste. En el caso de las mujeres, ocurre igual, si bien María del Carmen es más frecuente en cuatro provincias (Cádiz, Córdoba, Granada y Sevilla), el nombre de María a secas lo supera en las otras cuatro (Almería, Jaén, Huelva y Málaga). Existen hasta nombres, por ejemplo de mujer, que aparecen extremadamente localizados, como Capilla o María Capilla, especialmente común en la provincia de Jaén, o Aguas Santas o María Aguas, casi exclusivo de la provincia de Sevilla.
Otra de las novedades que ofrece este informe es la posibilidad de contemplar cuándo es más común que se ponga un nombre u otro a un recién nacido, porque incluso este acto es susceptible de seguir un patrón. Así, el informe demuestra que los nombres cristianos, que aparecen en el santoral, es más común que se pongan a los niños y niñas nacidas en fechas cercanas a la celebración de uno u otro santo, mientras que los nombres de ascendencia extranjera se reparten entre los meses del año, sin atender a concentraciones en torno a una fecha concreta.
En el caso de los apellidos, las variaciones no son tan habituales o frecuentes como los movimientos de los nombres, y permanecen durante un mayor número de tiempo ocupando las mismas posiciones. De esta forma, García, apellido que acompaña al 6,43% de los andaluces, sigue encabezando la lista de los más frecuentes (especialmente en Granada), seguido de Rodríguez, López, Sánchez y Fernández.