Las investigaciones se iniciaron ante diversas informaciones que manifestaban la existencia de una posible plantación de marihuana en un domicilio de Jaén donde se podían estar cosechando estas plantas ilegales.
Treinta días de vigilancias.
Con las informaciones anónimas recabadas y durante treinta días de vigilancias, los investigadores del Grupo de Estupefacientes constataron que el domicilio había sido alquilado por el arrestado. En dicha vivienda el detenido, presuntamente, había adecuado el recinto con el fin de instalar un invernadero de plantas de cannabis sativa, constatando las frecuentes entradas y salidas que efectuaba, en especial a unas horas donde la actividad laboral es nula.
La casa carecía de contrato de luz con un enganche ilegal.
Los investigadores habían diseñado un dispositivo especial de vigilancia en los alrededores de la zona investigada verificando la carencia de contrato de fluido eléctrico y de cómo éste era defraudado a la compañía eléctrica mediante un enganche ilegal, así como un fuerte olor a marihuana que salía de la vivienda vigilada, escuchando los aparatos de climatizadores tanto de día como de noche.
Una vez recabados diferentes indicios y pruebas, se produjo el registro domiciliario y la detención del presunto propietario del mencionado invernadero. La “Operación Pegaso” se ha saldado con la detención de una persona y presunto responsable del invernadero, así como la incautación de 200 plantas de marihuana, lámparas halógenas y varios semilleros.