Algunas de las líneas de trabajo del área han perseguido optimizar recursos y servicios públicos, redoblar esfuerzos para atender de forma personal las quejas o inquietudes de los vecinos, tomar la iniciativa para mejorar la limpieza de la ciudad en todos sus ámbitos y en todos sus barrios y pedanías o poner más medios al servicio del ciudadano con conciencia ambiental para facilitar sus buenas conductas. Asimismo, la Concejalía ha apostado por mejorar la limpieza y valoración social de la sierra y el Camino Viejo y ha mantenido una campaña permanente de concienciación medioambiental, con especial hincapié en los más pequeños.
Prueba de ello son las 3.500 personas que han participado en el Programa Municipal de Educación Ambiental, o el Plan de Limpieza del Mercadillo, que ha logrado una mejor imagen de una de las entradas a la ciudad, así como ahorrar costes y destinar personal que antes tenía que adecentar la zona a otras labores.
La Concejalía ha atendido de forma personal las quejas o denuncias de 111 vecinos en materia de limpieza, a lo que se suman las 153 visitas para mejorar este servicio en todos los barrios, pedanías y el Parque Natural. El área municipal ha dotado la ciudad con 420 nuevas papeleras (220 por colocar) y con dos nuevas máquinas para mejorar el servicio de limpieza. Se han ubicado un centenar de nuevos contenedores en zonas que requerían desdoblamiento y se han anillado 90 para evitar su movilidad. Asimismo, se han cambiado de ubicación 37, a demanda de los vecinos.
El Camino Viejo se ha señalizado por primera vez en 30 años, en colaboración con la Concejalía de Desarrollo Local, y ha sido objeto de diferentes campañas y reuniones informativas para fomentar su respeto y conservación. Asimismo, se han colocado 38 contenedores verdes en el Santuario, El Encinarejo y San Ginés. A ello se suma la instalación de 25 bidones verdes de recogida de residuos en el Camino Viejo. La Concejalía ha procedido a la limpieza de nueve vertederos en solares y ha Instalado paneles informativos en la ciudad, tanto para los recordatorios funerarios como para publicidad. Asimismo, ha retirado paneles en desuso de las calles y 19.500 kilos de chatarra de los almacenes municipales, que permitieron, con los ingresos obtenido tras su venta, comprar maquinaria y equipos de limpieza y jardines. Cincuenta contendores de vidrio fueron facilitados a los hosteleros, se instalaron 15 contendores para aceite usado y se dotó a las pedanías con 25 nuevas papeleras y nuevos carros de limpieza.
En control animal, destacan 167 adopciones de mascotas y la atención a 452 avisos ciudadanos. Asimismo, el Plan Municipal de Control de Palomas ha permitido capturar 3.569 ejemplares en las doce jaulas activas.
En parques y jardines, se ha actuado en catorce zonas verdes con mejoras y ampliación, y se han colocado 525 árboles nuevos. De las 8.000 plantas y flores utilizadas para adornar parques, jardines y rotondas, 5.000 se han obtenido directamente del Vivero Municipal, donde trabajan personas en riesgo de exclusión social en un programa municipal que da una nueva respuesta a las familias afectadas por la crisis. Así, reciben ayuda ofreciendo a cambio un bien a la comunidad, mientras se forman y motivan para buscar empleo o emprender una actividad. Asimismo, se podaron 996 árboles y se trató a 265 palmeras para prevenir la plaga del escarabajo Picudo Rojo. Dos campañas de desinsectación cubrieron todos los barrios de la ciudad actuando en 750 arquetas y alcantarillas.
En consumo, el concejal ha recordado que el servicio de la Oficina Municipal del Consumidor (OMIC) está para informar y apoyar a los vecinos. Alcántara ha afirmado que el mayor número de usuarios presentan quejas o reclamaciones relacionadas con la telefonía móvil, de las que el 90% se resuelven. Otros temas recurrentes son los problemas de vivienda (comunidades o alquiler) o de seguros y productos bancarios.
Algunos de los aspectos que requieren mejorar más especialmente para el concejal son el cumplimiento de las ordenanzas que obligan a los dueños de perros a llevarlos atados y a recoger sus excrementos, y a registrarlos y llevarlos atados y con bozal si son peligrosos. Otros retos son el respeto a los horarios establecidos para arrojar basura o el control de ruidos. El concejal ha animado a los vecinos a acudir a la Concejalía para informarse o transmitir quejas o denuncias, que el área trata de responder de la forma más rápida posible.