La Coordinadora de Organizaciones de Agricultores y Ganaderos, COAG Andalucía, muestra su satisfacción “en términos generales” ante la rebaja fiscal que hoy aparece publicada en el Boletín Oficial de Estado (BOE). Así, esta organización agraria valora especialmente que hayan sido atendidas las demandas de COAG en relación con sectores muy importantes para Andalucía, como el olivar (que pasa del 0,32 al 0,26), la ganadería (que llega a conseguir el módulo cero para el porcino), el algodón (del 0,37 al 0,26), la remolacha (del 0,13 al 0,07), las frutas y hortalizas, los cereales (del 0,26 al 0,18) o la apicultura (del 0,26 al 0,18).
No obstante, COAG Andalucía ha detectado que quedan fuera de la Orden algunas peticiones de esta organización en relación a determinadas comarcas (algunas tan significativas como el Poniente almeriense) con circunstancias similares a las de otras zonas cuyas demandas sí han sido atendidas. Esta organización agraria tiene ya confirmación de que se trata de un error que será subsanado en breve.
Las rebajas aprobadas reconocen así la importante merma de la renta de los productores andaluces que se produjo el año pasado, debida a efectos climatológicos adversos y epidemias que vinieron a agravar la situación de crisis de precios que afectó de forma generalizada a los distintos sectores productivos, aunque con especial incidencia en algunos de ellos.
Independientemente de las solicitudes concretas de las distintas provincias, COAG Andalucía pidió que, con carácter general, se redujeran los módulos correspondientes al sector apícola, el algodón, la remolacha, el olivar, la flor cortada, las hortícolas bajo plástico y los sectores ganaderos, entre otros.
El sector apícola, por ejemplo, sufrió las consecuencias de una mala campaña, provocada por un otoño que diezmó las colmenas y las abundantes lluvias en los meses de producción, que arruinaron en gran parte la floración y provocaron una mala cosecha de primavera, nula en las zonas de sierra y escasa para los apicultores trashumantes. La Orden recoge la petición de COAG, y el módulo aplicable pasa de 0,26 a 0,18.
En el caso del algodón, se pidió la reducción de 0,37 a 0,18 debido a las adversidades climatológicas y la aparición de algunas plagas que provocaron un menor rendimiento del cultivo. La Orden ha establecido una reducción menor, fijando el módulo en el 0,26.
En el caso de la remolacha, hay que destacar que las lluvias caídas desde mediados de diciembre de 2009 hasta mediados de marzo de 2010 impidieron realizar las necesarias prácticas culturales y fitosanitarias requeridas en la mayoría de las parcelas. Además de esto, y como factor añadido, este sector sufrió los estragos de la lepra, una enfermedad sin cura que provocó una importante caída de los rendimientos. Por eso, se pidió el módulo cero, aunque finalmente el aprobado es de 0,07 (frente al 0,13 inicial).
El olivar también ha sufrido adversidades climáticas y plagas, que se suman a la crisis de precios que padece un sector que acumula cinco años de pérdidas. Por eso, se solicitó una reducción del módulo de 0,32 a 0,18, aunque finalmente lo aprobado es el 0,26.
Las hortalizas bajo plástico han sufrido asimismo cuantiosas pérdidas debido a la incidencia del frío y la lluvia, que no sólo han provocado una notable merma de producción, por las inundaciones y encharcamientos, sino también daños importantes en las infraestructuras. Por ello, desde COAG Andalucía se ha solicitado la reducción del módulo aplicable a hortalizas de 0,26 a 0,18. La Orden ha fijado un módulo aún más bajo que el solicitado, el 0,16.
Otro sector perjudicado por las inclemencias del tiempo ha sido el de la flor cortada que, como consecuencia de las lluvias sufrió inundaciones y daños en estructuras de invernaderos, además de plagas y enfermedades. Por ello, se pidió que el módulo pasara del 0,37 al 0,12, aunque finalmente lo aprobado es el 0,22.
Por último, pero no menos importante, hay que destacar que los sectores ganaderos también sufrieron de forma especial las adversidades meteorológicas, especialmente durante el primer trimestre del año, cuando se produjeron lluvias intensas, que tuvieron como consecuencia la pudrición del pienso almacenado para alimentación y la muerte de animales provocadas por inundaciones. Por todo ello, desde COAG Andalucía solicitamos la reducción de los módulos aplicables a la ganadería de 0,13 a 0,06. En este caso, las reducciones establecidas varían en función de los distintos sectores. Así, para el porcino de carne se ha fijado el módulo cero (frente al 0,13 inicial); para la avicultura, el 0,05 (frente al 0,13 de partida); para el ovino y caprino de carne se ha establecido el 0,07 (frente al 0,13 inicial); para el ovino y caprino de leche y para el bovino de cría se ha aprobado el 0,13 (frente al 0,26 de partida), y para el bovino de leche se ha fijado el 0,20 (frente al 0,32 inicial).
Hay que recodar que las adversidades climáticas padecidas el año pasado vinieron a complicar aún más un año que se caracterizó por la inestabilidad de los mercados y la volatilidad de precios en todos los sectores, con una subida de los costes de producción que pone en peligro la viabilidad de las explotaciones agrarias, las cuales no están siendo capaces de gestionar sus actividades en estas condiciones, al verse imposibilitados para trasladar la subida de costes a los bajos precios de sus productos. A ello hemos de sumar los problemas derivados de la crisis financiera que estamos atravesando, que ha hecho tambalear la liquidez de muchas explotaciones, agudizados por las restricciones en los créditos, el endurecimiento de las condiciones para acceder a los mismos y los altos costes no sólo de producción sino del mantenimiento de las explotaciones.